La existencia de varias teorías y convicciones entre las personas no significa que no haya una única verdad absoluta. Por ejemplo, no importa cuántos conceptos y percepciones la gente tenga sobre los medios de transporte utilizados, si una persona posee un automóvil negro, no niega el hecho de que posee un automóvil negro, incluso si todo el mundo cree que el auto es rojo, esta creencia no lo hace rojo, porque hay una verdad absoluta, es un auto negro.
La multiplicidad de conceptos y percepciones sobre la realidad de algo no niega la existencia de una realidad absoluta para esa cosa.
Y Al-láh tiene el ideal más alto, por lo que no importa cuántas percepciones y conceptos la gente tengan sobre el origen de la existencia, esto no niega la existencia de una realidad, que es el Único Dios Creador que no tiene la imagen que los humanos tienen, sin pareja ni hijo, si el mundo entero quisiera adoptar que el Creador está encarnado en forma de animal, por ejemplo, o de ser humano; esto no lo convierte en tal.
Es ilógico que la condena de un ser humano regido por sus caprichos decida si la violación es mala o no. Es claro que en la violación misma hay una violación de los derechos humanos, y una violación de su valor y libertad, y esto es lo que indica que la violación es mala, así como la homosexualidad, que es una transgresión a las normas naturales, y las relaciones extramatrimoniales. Sólo lo correcto es válido aunque todo el mundo converja en su invalidez, y el error es claro como la claridad del sol, aunque todos los seres humanos reconozcan su validez.
Lo mismo sucede con respecto a la historia, si aceptamos que cada época debe escribir la historia desde su punto de vista porque la apreciación de cada época de lo que es importante y significativo para ella difiere de la apreciación de la otra época, esto no relativiza la historia, porque esto no niega que los eventos tengan una realidad, nos guste o no, pues la historia desde la perspectiva de los seres humanos está sujeta a la distorsión y la inexactitud de los acontecimientos que se basan en caprichos y jamás será como la historia del Señor de los Mundos para ellos, que es extremadamente precisa en el pasado, presente y futuro.
La afirmación de que no existe una verdad absoluta que muchos adoptan es en sí misma una creencia sobre lo que está bien y lo que está mal, y tratan de imponérsela a los demás, adoptando un estándar de comportamiento y obligando a todos a ajustarse a él, violando así lo que afirman defender una posición autocontradictoria.
La evidencia de la existencia de una realidad absoluta es la siguiente:
Conciencia: (estímulo interno) conjunto de pautas morales, que limita el comportamiento humano, evidencia de que el mundo funciona de cierta manera y que existe el bien y el mal. Este principio ético comprende obligaciones sociales que no pueden ser cuestionadas ni ser objeto de un referéndum público. Son hechos sociales indispensables para la sociedad en su contenido y significado. Por ejemplo, faltar el respeto a los padres o robar siempre se considera un comportamiento desagradable y no puede justificarse como honestidad o respeto. Esto se aplica en general a todas las culturas en todos los tiempos.
Ciencia: es darse cuenta de las cosas como realmente son, que es conocimiento y certeza, por lo que la ciencia depende necesariamente de la creencia en la existencia de hechos objetivos en el mundo que pueden ser descubiertos y comprobados. ¿Qué se puede estudiar si no hay hechos establecidos? ¿Y cómo se sabe si los hallazgos científicos son reales? De hecho, las propias reglas científicas se basan en la existencia de verdades absolutas.
Religión: todas las religiones del mundo brindan una concepción, significado y definición de la vida, como resultado del afán urgente del hombre por obtener respuestas a las preguntas más profundas. A través de la religión, una persona busca su fuente y destino, y la paz interior que solo puede lograrse obteniendo estas respuestas. La existencia de la religión en sí misma prueba que el hombre es más que un simple animal evolucionado, prueba la existencia de una meta superior para la vida, y la existencia de un Creador que nos creó por una sabiduría, e implantó en el corazón humano el deseo de saber de Él. De hecho, la existencia de un Creador es el criterio de la verdad absoluta.
Lógica: todos los seres humanos tienen conocimientos limitados y mentes perceptivas limitadas, por lo que es lógicamente imposible adoptar afirmaciones absolutas negativas. Una persona no puede decir lógicamente: "No hay Dios", porque para que una persona pueda decir tal declaración, debe tener un conocimiento absoluto de todo el universo de principio a fin. Dado que esto es imposible, lo más lógico que una persona puede hacer es decir: "Con el conocimiento limitado que poseo, no creo en la existencia de Dios".
Compatibilidad: la negación de la verdad absoluta conduce a:
La contradicción de nuestra certeza de la validez de lo que está en la conciencia, experiencias de vida y la realidad.
No hay nada bueno o malo en la existencia. Si hiciera bien en ignorar las normas de tránsito, por ejemplo, pondría en peligro la vida de quienes me rodean. Así, la colisión se produce en los estándares del bien y del mal entre los humanos. Basado en eso, es imposible estar seguro de nada.
Y el hombre obtiene libertad absoluta para hacer lo que le plazca de los delitos.
La imposibilidad de hacer leyes o hacer justicia.
Una persona con libertad absoluta se convierte en un ser detestable, y está probado sin lugar a dudas que es incapaz de soportar esta libertad. El comportamiento incorrecto es incorrecto, incluso si el mundo está de acuerdo en su validez, pues la única y verdadera absoluta es que la moral no es relativa y no cambia con el tiempo o el lugar.
Orden: la falta de verdad absoluta conduce al caos.
Por ejemplo, si la ley de la gravedad no fuera un hecho científico, no estaríamos seguros si estamos de pie o sentados en el mismo lugar hasta que nos volvamos a mover. No confiaríamos en que la suma de uno y uno sea dos a la vez, el efecto sobre la civilización sería grave. Las leyes de la ciencia y la física serían insignificantes, y sería imposible que la gente trabaje en la compra y venta.